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En la construcción moderna, los sistemas de ventilación son vitales para mantener tanto la comodidad interior como la calidad del aire. Uno de los componentes más importantes de estos sistemas, los conductos de aire flexibles, no solo transportan el flujo de aire, sino que también ofrecen diferentes características. Especialmente en instalaciones industriales, edificios comerciales y áreas que requieren alta seguridad, los conductos de aire flexibles resistentes al fuego son indispensables.
¿Por qué conductos de aire resistentes al fuego?
La seguridad contra incendios es una de las principales prioridades en el diseño y construcción de cualquier edificio. Mientras que los sistemas de ventilación normalmente proporcionan circulación de aire, durante un incendio pueden representar un riesgo grave al permitir que las llamas y el humo se propaguen rápidamente por todo el edificio. Esto crea un escenario peligroso conocido como el “efecto chimenea”. Los conductos de aire retardantes de llama y resistentes al fuego están especialmente diseñados para minimizar este riesgo.
Estos conductos ayudan a ralentizar o detener completamente la propagación del fuego, permitiendo que las personas dentro del edificio evacúen de manera segura. Incluso cuando se exponen a altas temperaturas, se fabrican para mantener su integridad, evitando que las llamas y el humo tóxico lleguen a otras áreas a través del flujo de aire. Esta característica proporciona un tiempo crítico para que los equipos de bomberos intervengan y limita los daños dentro del edificio. Además, garantiza la funcionalidad continua de los sistemas de extracción de humo.
Los conductos de aire resistentes al fuego se fabrican con materiales Al-PET con una mayor proporción de aluminio, lo que garantiza una durabilidad superior en condiciones de incendio. Los adhesivos utilizados en la producción también están formulados con compuestos resistentes al fuego. Su fiabilidad se verifica mediante rigurosas pruebas y certificaciones internacionales, incluidas CSTB M0/M1 y BS 476 Part 7 & 20, que demuestran la resistencia de los productos al fuego bajo condiciones definidas de temperatura, presión y duración.
M0 Esbo: Una solución centrada en la seguridad contra incendios
ESBO, conocida por sus soluciones innovadoras en el sector de la ventilación, también tiene ambiciones en cuanto a productos resistentes al fuego. Uno de estos productos, la serie M0 Esbo, ha sido desarrollada específicamente para aplicaciones que requieren seguridad contra incendios y durabilidad.
Características clave de M0 Esbo:
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Estructura resistente al fuego:
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M0 Esbo es retardante de llama y a prueba de fuego. En caso de incendio, previene la propagación de llamas y humo, contribuyendo a la protección de vidas y bienes.
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Alto rendimiento:
Según los estándares TSE, el producto puede soportar hasta 5.000 Pa de presión. La velocidad máxima de operación del aire es de 30 m/s.
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Durabilidad:
M0 Esbo es hermético y resistente a la tensión y los impactos.
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Amplio rango de diámetros:
Disponible en diámetros que van de 76 mm a 610 mm para adaptarse a diferentes necesidades.
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Propiedad higiénica:
Al igual que otros productos ESBO, M0 Esbo puede fabricarse opcionalmente con propiedades higiénicas, ofreciendo un 99,9 % de eficacia antimicrobiana. Esto asegura la calidad del aire mientras previene el crecimiento de bacterias y microorganismos.
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Variedad:
La serie M0 Esbo puede utilizarse con o sin aislamiento. Además, está disponible la opción de aislamiento acústico (sono).
La serie ESBO M0 Esbo no solo garantiza la seguridad contra incendios, sino que también mejora el rendimiento y la fiabilidad de los sistemas de ventilación con sus características adicionales. Este producto ofrece una solución completa y confiable, especialmente para entornos de alto riesgo.